Los mejores atardeceres en la Sierra Norte de Madrid

Los mejores atardeceres en la Sierra Norte de Madrid

Pocas cosas más hermosas existen en este mundo que ver atardecer. Bueno, puede que ver amanecer, pero eso requiere levantarse pronto de la cama y siempre resulta más complicado… Además, contemplar una puesta de sol es la mejor manera para cerrar una jornada memorable llena de alegría, buena comida y mejor compañía. Y eso sin contar con la profunda sensación de paz y relajación que nos trasmiten los últimos rayos de nuestro astro rey, los cuales bañan el paisaje con su paleta de colores anaranjados, amarillentos y rojizos.

Ahora que llega el buen tiempo, disfrutar de estas bellas estampas que nos regala la madre naturaleza resulta una actividad casi obligatoria. Pero… ¡ojo! No todos los lugares para ver un atardecer son iguales. Hay determinados sitios especiales, mágicos, en los que el crepúsculo se convierte en una experiencia inolvidable.

Y aquí es donde entra la Sierra Norte, una de las comarcas más bonitas no solo de la Comunidad de Madrid, sino de España gracias a su enorme patrimonio cultural y una riqueza medioambiental envidiable. Adéntrate en ese “otro Madrid” verde, rural y silencioso que se encuentra a tan solo unos 90 kilómetros de la capital.

Prepara tu cesta de picnic y tu cámara de fotos para inmortalizar sus panorámicas y descubre con nosotros estos 6 increíbles enclaves que te traemos, donde podrás terminar un día de diversión con tus amigos o familia o pasar una velada romántica con tu pareja e incluso, quién sabe, declararte.

Hayedo de Montejo de la Sierra

Situado en Montejo de la Sierra y radicado dentro de la sierra del Rincón, catalogada como Reserva de la Biosfera por la Unesco, el Hayedo de Montejo es el único bosque de hayas de la Comunidad de Madrid y uno de los más meridionales de Europa. Un auténtico vergel que atesora más de 90 especies animales y otras numerosas variedades vegetales como enormes acebos, robles centenarios y pinos silvestres. Por ello, fue declarado Sitio Natural de Interés Nacional en 1974 y Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco en 2017.

Con el fin de preservar su conservación natural, para poder acceder a él es indispensable reservar una entrada, que es gratuita, en la página web www.sierradelrincon.org. Una vez en el Hayedo se pueden realizar tres itinerarios: la Senda del Río, la Senda de la Ladera y la Senda del Mirador. Es preferible este último, pues culmina con unas espectaculares panorámicas de la cuenca alta del Jarama.

Y tras ver un romántico atardecer en el Hayedo de Montejo, nada mejor que pasar la noche en el Estudio Biosfera o el Estudio Vistas, dos elegantes apartamentos especialmente diseñados para parejas que cuentan con una chimenea, un colchón viscoelástico y una bañera exenta de estilo Victoriano de dos plazas al lado de la ventana para vislumbrar la Reserva de la Biosfera a la luz de la luna.

 

El atardecer es un momento fascinante y pasional. Vívelo en medio de la hermosura paisajística de la Sierra Norte.

 

Bosque finlandés y Monasterio de Santa María de El Paular

¿Sabías que sin salir de Madrid puedes visitar Escandinavia? Pues sí, solo hay que ir hasta Rascafría, donde se ubica el bosque El Potario, aunque todos lo conocen como el bosque finlandés. Y es que este trocito de Laponia se creó en los años 80 para conmemorar el hermanamiento entre la localidad madrileña y Helsinki. Está formado por abedules, abetos, álamos y otras especies vegetales típicas de las tierras del norte, generando efigies llenas de encanto que te harán pensar que te has colado en un cuento de hadas o una película de fantasía.

Y justo enfrente de El Potario se halla el Real Monasterio de Santa María de El Paular, al que podríamos denominar como la joya arquitectónica del valle alto del Lozoya. Fue fundado en 1390 por orden del rey Enrique II de Castilla y tras más de 600 años sigue en perfecto estado. De estilos gótico y barroco y declarado Monumento Histórico-Artístico Nacional, aún hoy en día vive allí una comunidad de monjes benedictinos.

Para dormir puedes ir a Piñuecar, un municipio a solo media hora en coche, donde para parejas disponemos de la Casa La Fragua y la Casa Lila, dos inmuebles de dos plantas hechos en piedra y madera con las mejores vistas de toda la sierra, un salón comedor con chimenea y un baño completo con ducha de hidromasaje.

Y si vas en grupo o en familia te proponemos las casas Hortensia, Camelia, Amapola u Orquídea. En las cuatro caben hasta 6 huéspedes al tener dos habitaciones y un sofá convertible en una cama de dos plazas. También tienen aparcamiento privado, un espacioso salón comedor con chimenea francesa, un baño con bañera con hidromasaje y un patio con barbacoa y muebles de jardín.

Pontón de la Oliva

En plena sierra de Ayllón y muy cerca de Patones de Arriba, uno de los pueblos más representativos de la arquitectura negra al estar sus edificios construidos con pizarra negra, está el Pontón de la Oliva, la presa más antigua de la Comunidad y del sistema de aguas del Canal de Isabel II. Fue construido en 1857 por unos 1.500 prisioneros de las Guerras Carlistas que durante 6 años y bajo durísimas condiciones consiguieron levantar un dique de 72 metros de longitud y 27 metros de altura. Sin embargo, los ingenieros escogieron mal el lugar y pronto aparecieron filtraciones, cayendo en desuso y siendo sustituido por el embalse de El Villar.

Actualmente es un punto de observación magnífico gracias a su impresionante pasarela volada que discurre por la pared del cañón y que deja ver su maravilloso entorno natural, sus acantilados y sus cárcavas, formadas por la erosión del agua, de color rojizo y aspecto marciano.

Atalaya de Venturada

Otra opción son las vistas de la atalaya de Venturada, declarada Bien de Interés Cultural en 1983. Se ubica en el monte El Carrascal, a la entrada de la urbanización Cotos de Monterrey, y data de finales del siglo IX, durante el emirato de Muhammad I. En su momento constituyó una de las fronteras entre musulmanes y cristianos, pero ahora esta privilegiada posición que se usaba para vislumbrar el acercamiento del enemigo te servirá para gozar de unas panorámicas en las que podrás distinguir desde el Pico de la Miel hasta La Pedriza y el embalse de Pedrezuela.

Ya hayas estado en el Pontón de la Oliva o la atalaya de Venturada, una vez caída la noche puedes ir a la Casa Pico de la Miel en La Cabrera, que queda muy cerca de ambos emplazamientos. Se trata de una impresionante casa rural con 1.000 m2 de terreno. Dispone de 5 habitaciones donde pueden dormir hasta 13 personas, un salón comedor con chimenea, dos baños y un aseo.

Encima es perfecta para el verano por su piscina cubierta y climatizada de 8×4, varias tumbonas para tomar baños de sol, un quincho con hamaca, una barbacoa y un jardín con árboles frutales que dan sombra sobre su porche. Brinda unas bellas vistas del Pico de la Miel y, como extra, está provista de conexión de fibra óptica, juegos de mesa, libros y juegos varios. No estamos seguros de si te gustarán más los atardeceres o nuestra casa.

 

Experimenta un atardecer diferente recorriendo los bosques de El Potario o el Hayedo de Montejo de la Sierra.

 

Miradores del embalse del Atazar

Muy cerquita del Pontón de la Oliva están los famosos miradores del embalse del Atazar, unos observatorios turísticos situados alrededor de la presa que proporcionan excelentes perspectivas de la laguna y las cordilleras montañosas que la circunvalan: la sierra de La Cabrera, el valle alto del Lozoya y la sierra de Ayllón. Una excursión fascinante y que a buen seguro te dejará boquiabierto por su hermosura y las gigantescas dimensiones de esta construcción, pues prácticamente alberga la mitad de las reservas de agua de la Comunidad de Madrid.

A unos 40 minutos en coche se encuentra Paredes de Buitrago, donde te puedes hospedar en la Casa Luna, un edificio de dos plantas para 4 personas con un precioso salón comedor con chimenea, un patio de luces, barbacoa y dos dormitorios con techos de vigas de madera y espaciosos armarios, o la Casa Sol, para 6 personas y con una habitación con cama de matrimonio y balcón, otra con dos camas y una última con una cama simple que se puede ampliar a dos camas.

Puerto de Puebla de la Sierra

Con 1.636 metros de altitud, llegar a este lugar te recompensará con una puesta de sol que nunca olvidarás, ya que otorga una gran perspectiva de la sierra del Rincón. Para alcanzarlo hay que tomar la carretera M-130 que une las localidades de Prádena del Rincón y Puebla de la Sierra, la cual atraviesa de norte a sur la sierra del Lobosillo. Es una zona de montaña bastante virgen y poco explotada turísticamente, así que aquí podrás relajarte escuchando tan solo el sonido del viento y el trino de los pájaros mientras observas el colorido de los últimos vestigios del día.

De ahí puedes ir a Prádena del Rincón, donde dormirás en la Casa Roble I o la Casa Roble II, que destacan por tener una buhardilla con techos de vigas de madera y una cama de matrimonio de 160 centímetros y colchón de primera calidad, un espacioso salón comedor con chimenea y un patio independiente con barbacoa y muebles de jardín.

Ahora te toca a ti escoger tu sitio para ver atardecer en la Sierra Norte, pero lo bueno es que como cada día hay uno, puedes ir probando todos estos enclaves y hacer tu propio ranking. Y, por supuesto, si tienes dudas o consultas a la hora de realizar una reserva o llegar a algún lugar concreto, te invitamos a ponerte en contacto con nosotros a través del correo electrónico [email protected]. ¡Estaremos encantados de ayudarte!

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